La ley modelo es un marco jurídico de referencia que los países pueden utilizar como base para desarrollar sus propias políticas y leyes nacionales para apoyar a millones de personas que dependen de la pesca artesanal como su principal medio de vida.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), más de 2,3 millones de personas trabajan en la pesca en América latina y el Caribe y la mayor parte lo hace a pequeña escala.
Cada año, el sector pesquero genera más de 11 millones de toneladas de productos provenientes de las capturas en mares y aguas continentales, pero los pescadores artesanales enfrentan serias limitaciones frente a los grandes operadores del sector.
“Esta ley da herramientas para reconocer y proteger los derechos de acceso de la pesca de pequeña escala”, explicó Armando Castaingdebat, presidente de la Comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca del Parlatino.
Alejandro Flores, Oficial de Pesca y Acuicultura de la FAO, reveló que “las directrices y recomendaciones de la nueva ley permiten fortalecer la sostenibilidad del sector e impulsar su contribución a la erradicación del hambre y la pobreza”.
La Ley Modelo contiene 10 capítulos que tocan temas claves para el desarrollo del sector como el registro pesquero, la generación de información para la toma de decisiones y los derechos y deberes de quienes trabajan en el sector.